jueves, 23 de diciembre de 2010

Propaganda blanca

Leía ayer (técnicamente hoy, pues el post rebasaba por escasos minutos la medianoche) a ese melómano entendido en fútbol que es Julián Ruiz escribir que, en los últimos meses, la prensa española se había visto sometida por el influjo del “buenismo azulgrana” hasta un punto insospechado. No gustamos en este blog de hablar del eterno rival (esto sería discutible con una mirada histórica lo suficientemente amplia), pues siempre hemos entendido el fútbol como exaltación de los triunfos propios y no de las miserias ajenas; pero sirvámonos de un ejemplo para entender hasta qué punto la reflexión de Ruiz es acertada.
El pasado domingo, cuando uno de los ayudantes de Mourinho tiró al césped accidentalmente al delegado de campo, se llegaron a oír voces clamando por su inmediato despido (en El Larguero, por ejemplo, en boca del señor X). Se aprovechó incluso la euforia para ridiculizar a Mourinho ante su supuesta amenaza de no comparecer en rueda de prensa y hubo quien sugirió que, en caso de que el luso se presentase ante los medios, se negaría a responder sobre cualquier pregunta relativa al director general deportivo. Cualquiera que escuchase la rueda de prensa de ayer de Mou entenderá que ni postergó su comparecencia ni eludió ninguna cuestión, así que no hace falta dar más pábulo al asunto. Tomemos el puente aéreo. Guardiola anuncia vacaciones extra para Messi, en un proverbial ejemplo de equidad, y en rueda de prensa los periodistas se echan como lobos encima de Pep para cuestionarle sobre el impacto negativo que tal agravio puede tener en el vestuario. ¿Cómo? ¿Que ustedes no escucharon esas preguntas? Ah, cierto, ahora que caigo, estaban sólo en mi cabeza.
No creo en teorías conspiratorias ni en confabulaciones judeomasónicas en contra del club más grande de la Historia; pero eso es una cosa y otra que, ante el ambiente general de palmerismo que rodea a todo lo que huela a azulgrana, uno no deje de sorprenderse por el distinto rasero empleado para medir acontecimientos según si el que lo dice es antipático o mea colonia.
Digo todo esto porque aquella expresión de la prensa “amaestrada por el buenismo azulgrana” me trajo a la mente el concepto de propaganda negra, ese recurso utilizado desde tiempo inmemorial (aunque uno de los ejemplos más citados es el de los nazis en la Francia invadida durante la Segunda Guerra Mundial) que consistía en lanzar mensajes de desaliento desde fuentes que los receptores consideraban equivocadamente como amigas. Y ese doble rasero al que aludía antes se aplica, a mi entender, desde cavernas mediáticas no muy remotas, como diría el otro.
Frente a ese ejercicio de propaganda negra barata al que se ve sometido cíclicamente el madridismo, e intuyo que es el aficionado quien más lo sufre, de ahí las simpatías hacia Mou, el único que se resiste a comprar motos que no carburan, la mejor solución es siempre una exhibición de propaganda blanca. Eso, a fin de cuentas, es lo que vino a ser el partido de anoche ante el Levante.
Más allá de los ocho goles, que quedarán para engordar titulares y estadísticas, el Madrid dejó la impresión de que, aunque sigue estando en construcción, es uno de esos equipos frente a los que los más modestos viven permanentemente en el alambre. Si el saco no se rompe, uno puede soñar con la campanada, como bien sabe el Levante; pero, como el zurrón se rasgue pronto, la cosa puede acabar a la tremenda. Como bien sabe el Levante.
Que sí, que Benzemá sólo marca ante los equipos pequeños, de momento, pero que lo haga de tres en tres y dejando destellos de clase (no sólo en los goles) que a uno indefectiblemente le recuerdan al gran R9 es bueno para el Madrid. Que salga del campo ovacionado es bueno para el Madrid. Que Cristiano los marque también a tríos casi sin querer y que Özil sea tan descaradamente magistral es bueno para el Madrid. Que cada vez que Di María coge el balón o que Xabi levanta la cabeza se despierte un runrún en la grada es bueno para el Madrid. Que la zaga siga rotando jugadores sin perder seriedad es bueno para el Madrid. Que Casillas acabe uno de cada dos partidos sin despeinarse es bueno para el Madrid. Que Morata tenga tan buena pinta de futbolista, que Granero empiece a tener arranques de genio y que Pedro León salga y cumpla es bueno para el Madrid. Y que lo entrene alguien que va de frente, guste o no, y tiene tanta idea de fútbol es bueno para el Madrid.
Y, como he dicho otras veces no hay espejos que valgan ni rivales en los que haga falta mirarse, pues el Madrid se ha construido siempre a base de convicciones propias y de un modelo al que, en los últimos años, sólo le ha faltado tiempo y le han sobrado excesos de propaganda negra. Y a nosotros, de siempre, nos ha gustado el blanco.
R
Foto: Ángel Martínez

3 comentarios:

  1. La primera parte de la entrada se te ha deformado ;)

    ¿Crees que deberían haber dejado que el Levante metiera el gol llamado del honor?
    ¿Crees que el Madrid deberia fichar en invierno?

    vota en www.elfutbolinmerengue.blogspot.com

    http://www.facebook.com/pages/El-Futbolin-Merengue/137005726348672

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  2. Gran articulo, si señor. Respecto a lo que dices de la propaganda, decir que no se si sera manipulacion de los medios, o que sera. Pero si es cierto que en los ultimos años, y en especial este, se estan introduciendo una serie de discursos destinados a justificar todo lo que huela a blaugrana y a dilapidar todo lo que huela a Real Madrid. Ayer por ejemplo en Punto Pelota, un programa creo que, para nada es cule, destino TODO su espacio a hablar de los desafectos de Mourinho y su supuesta mala relacion con Valdano, y nada o casi nada del partido de anoche.

    Creo que ademas muchos de estos discursos que circulan son por culpa del propio Real Madrid. Me explico: el Barça aplica una brillante politica comunicativa, apoyada en sus medios y en sus resultados deportivos. Asi cuando otro medio "osa" criticarles (justificada o injustificadamente) saben darle la vuelta a la situación, de tal manera que el que queda mal es el medio que les ha criticado, y quien paga los platos es el propio Real Madrid (la prensa de la Capital-la prensa de Madrid-La prensa del Real Madrid-El Real Madrid-el madridismo).

    Por contra el Real Madrid parece impasible ante las criticas, y todas las declaraciones que surgen por parte del club no dejan de ser "bien intencionadas", dejando a Mourinho solo en la defensa de su equipo, siendo este una presa facil de situar en la diana.

    Asi, desde el Barça, se amaestra a unos medios que dicen "oye, con estos no nos podemos meter" ¿y a por quien van? pues a por el Real Madrid: ese club al que se puede cuestionar todo, buscar polemicas donde no hay nada, y rajar agusto sin que nadie desde el Club diga una palabra mas alta que otra a la hora de ponerles en su lugar...salvo claro, nuestro mister, al que se le deja en perpetua soledad y en el punto de mira de todos.

    Un saludo desde http://www.lanaranjamerengue.blogspot.com/

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  3. Gracias por vuestra participación a los dos. Yo creo que "dejar meter" goles al contrario es la primera manera de faltarles al respeto. Con respecto a lo de la prensa, no creo que se trate tanto de una brillante política de comunicación del Barça (que también) como el carácter diferente de la prensa deportiva en Madrid y Barcelona. En Madrid, aunque con tintes merengues, aspira a vender en toda España y para gente que no sólo es del Madrid; esto, con el tiempo, ha llevado a que sea más fácil meter palos al Madrid. Eso sería impensable en la prensa de Barcelona, donde el 90% de los lectores son culés. Y en ese ambiente, los encargados de comunicación del Barcelona viven de manera más plácida.

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